Petróleo: el caso de los Países Bajos

Hegemonía
Por Salvador Barragán Heredia*
(Publicado por Global Energy. Diciembre de 2008)

Las Provincias Unidas Holandesas declararon su independencia a España en 1579; dos siglos después dominaron al mundo a través de los océanos, establecieron colonias alrededor del orbe. Se libraron de la ocupación francesa, formaron el Reino de los Países Bajos en 1815, siendo que en 1830 Bélgica formó un reino independiente, se declararon neutrales en la Primera Guerra Mundial, pero sufrieron la invasión nazi durante la Segunda Guerra. A partir de esa amarga experiencia, los holandeses se convirtieron en destacados defensores de la cooperación internacional y en una economía digna de ser ejemplo; veamos:

La moderna Holanda dejó de presentarse al mundo a través de sus molinos, zuecos y tulipanes tradicionales, ya que sus estrategias públicas los ha colocado en el octavo lugar mundial en exportaciones y es que en la actualidad se enorgullecen de ocupar la tercera posición en el planeta en lo que respecta a las exportaciones agrarias después de Estados Unidos y Francia. Si bien Holanda cuenta con quince ganadores de premio Nobel, en campos como la paz, la química, física, medicina o la economía; hay que decir que el mayor logro holandés es tener el primer sitio mundial en lo que respecta al combate a la pobreza, estrategia congruente con el fin último del Estado, el bienestar de sus gobernados.
Holanda es el décimo país con mejor calidad de vida: ahí habitan 16.5 millones en un territorio 47 veces inferior a México. A pesar de sus limitaciones en términos geográficos, los holandeses piensan en grande, basta recordar sus impresionantes logros en el deporte, quien no recuerda a los futbolistas holandeses, Ruud Gullit y Marco Van Basten, quienes juntos formaron parte de una de las mejores escuadras de la historia del AC Milán, dos veces campeones de Europa y de la Copa Intercontinental. En la actualidad, Holanda conquista otra clase de trofeos, altamente generadores de riqueza y progreso y bienestar; así se distinguen los Países Bajos, por su liderazgo en temas como la agricultura, ciencia, historia, arte, política y energía.
El progreso holandés se inició en la década de los ochentas, cuando se inspiraron en la economía abierta; así, la “naranja mecánica” impulsó grandes regulaciones laborales, factor clave para obtener para el 2008, una moderada inflación del 1.8 por ciento y una tasa de desempleo del 3.2 por ciento. Indicadores que contribuyeron para celebrar un pib per cápita de 38,500 dólares anuales y un crecimiento anual del 3.5 por ciento; además, generaron un superávit en cuenta corriente y un importante papel como centro europeo de transporte. Hoy, Holanda ocupa el lugar trece de los países con mayor libertad económica en el mundo, sus operaciones comerciales cobran vigencia en prácticamente todo el planeta.
Holanda se distingue por su tradicional congruencia, citando a Marco Tulio Cicerón, “…todas las cosas fingidas caen como flores marchitas, porque ninguna simulación puede durar tanto tiempo”; en armonía, la política exterior de Holanda es admirada por el imperio de la ley, los derechos humanos y la democracia. El Estado de Derecho ha sido fundamental y contundente para que el último informe de Transparencia Internacional ubique a Holanda como el séptimo país menos corrupto y más transparente a nivel mundial, lo que lo convierte en un atractivo sui generis de inversores.
De facto, el derecho internacional es un motor generador de bienestar para Holanda: los estudiosos del derecho recordamos con admiración, el “Mare Liberum” y el “De Iure Belli ac Pacis” del holandés Hugo Grocio, quien estableció las bases del Derecho Internacional moderno en el siglo XVII. Desde entonces y hasta nuestros días, Holanda tiene una activa presencia de marcos multilaterales como las Naciones Unidas, la Unión Europea y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), actividades estratégicas que le han permitido distinguirse como un precursor de paz en el mundo.
Al ser un país con una economía de fuerte orientación internacional, mantiene en un clima de concordia relaciones con los países vecinos: son socios comerciales del Benelux, Bélgica y Luxemburgo, Alemania y Francia, el Reino Unido y los países escandinavos, así como el resto de la Unión Europea y de la OTAN. Holanda es miembro fundador de la ONU, la OTAN, las Comunidades Europeas, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y la Unión Europea Occidental.
Los Países Bajos producen grandes corporaciones inspiradas en la ingeniería genética y en sus buenos sistemas de marketing, basta observar que producen más flores que Colombia, a pesar de tener menos ventajas climáticas, geográficas y una mano de obra más costosa. Se pueden citar algunos ejemplos de éxito de compañías holandesas que tienen presencia en todo el mundo, tal es el caso de Royal Ducht Shell, ING Group, Fortis, Aegon, Royal Philips Electronics, Schulumberger, Royal KPN, Ahold, Akzo Nobel, Heineken, EADS, TNT, SNS Reaal, Royal DSM y Unilever, por mencionar algunos ejemplos citados por Forbes.
En gran medida el éxito de éstas empresas se debe al entorno de negocios que ofrece Holanda, toda vez que es una nación marítima, comerciante y negociadora; entre sus cualidades principales destaca la impresionante red de transporte que propicia el buen comercio; ya cuentan con el aeropuerto de Schiphol -el cuarto más importante de Europa- y el puerto de Rotterdam, posicionado como uno de los más grandes y mejores del mundo, por sus más de 350 millones de toneladas de cargamento al año y por ser capaz de generar más del 50 por ciento del tráfico de carga en carretera por Europa.
Por otra parte, las comunicaciones holandesas son eficientes y estratégicas, con un inventario de más de 7.6 millones de líneas de telefonía fijas, 15.8 millones de líneas de celular y más de 14.5 millones de usuarios de Internet, lo que los sitúa como una nación altamente comunicada con el mundo hoy globalizado.
Evidentemente, ningún país puede imaginar crecimiento económico sin poseer la fuerza energética necesaria para realizar sus actividades comerciales. Atendiendo este supuesto, en estos días de invierno, Holanda es la décima quinta potencia exportadora de crudo, con 1.546 millones de barriles diarios; y en lo que respecta al gas, son la décima potencia en exportaciones y es que cuentan con enormes yacimientos de gas en Slocheter que se localizan en la provincia de Groningen y que constituyen uno de los campos más grandes en el mundo, con reservas probadas de gas natural que ascienden a más de 2 billones de metros cúbicos.
Si bien, el tránsito hacia a la vanguardia no ha sido tarea fácil, el reto hacia el futuro es todavía mayor, pues el cambio climático es un problema que a todos los países debe de preocupar, sobre todo ante los fuertes aumentos de consumo mundial de energéticos; a pesar de ello, hay países que se mantienen bien alejados del compromiso con la humanidad, con tal de obtener riqueza a través de la explotación de energéticos; mientas tanto, el gobierno holandés se esfuerza para trabajar en colaboración con la industria y las organizaciones no gubernamentales y cumplir a cabalidad con los compromisos establecidos en el Protocolo de Kioto, en la reducción de emisiones de gas invernadero en un 6 por ciento en el periodo 2008 a 2012.
Es justo reconocer que Holanda ha jugado un papel crucial en energías limpias, así sus políticas se distinguen en el marco institucional diplomático, como aportaciones eficientes y responsables ante el gran reto del cambio climático en términos de sustentabilidad ambiental. Gran parte del éxito del pueblo holandés obedece a que la eficiencia energética y el medio ambiente son temas que no han sido contaminados por los intereses surgidos de la clase política. Es conveniente citar al estadounidense Al Gore, distinguido precursor de las teorías de medio ambiente y de paz: “no se trata de una cuestión política, sino moral, que afecta a la supervivencia de la humanidad”.
Así, Holanda ha tenido bien concretar proyectos de largo alcance para posicionarse como un sujeto activo a favor de la sustentabilidad ambiental. Destacan cuatro precisos proyectos:
1) Energía eólica. Peter Drucker señalaba que “…no puede impedirse el viento. Pero pueden construirse molinos”. Holanda es un ejemplo de un país innovador en energías sostenibles, recordemos los molinos de viento contemplados con admiración por los turistas, hoy los molinos de viento se han transformado en motores de energía de vanguardia en los mares holandeses. Así, en junio de 2008, se inauguró el Parque Eólico Princesa Amalia, situado a 23 kilómetros de la costa de Ijmuiden; está construido en aguas a 24 metros de profundidad, se trata del molino de viento más alejado de tierra y erigido a mayor hondura que existe en todo el mundo. Está formado por 60 turbinas de 2 MW de potencia que pueden producir 435 GWh al año, lo que equivale al consumo de 125 mil hogares holandeses, con ello se puede evitar la emisión de 225 mil toneladas de CO2. Está construido en el mar, porque es ahí donde se aprovecha a plenitud el viento, incrementando la potencia en un 30 por ciento para generar más energía, además, de que no existe contaminación visual ni auditiva. Se trata de una energía limpia que le permite a Holanda desvincularse de la importación de petróleo de otras regiones del mundo.
2) Gas. Recordando a Chaplin “El tiempo es el mejor autor, siempre encuentra un final perfecto”; a juicio del gobierno holandés las reservas que tiene Holanda en la zona de Groninga decrecen considerablemente, las proyecciones apuntan que para 2025 el país podría convertirse en un importador de gas, por tal motivo, se tiene previsto que para el 2011 terminarán los trabajos de construcción de un recinto en el puerto de Rotterdam para almacenar 9 mil millones de metros cúbicos de gas natural por año procedente de Medio Oriente. La inversión supera los 800 millones de euros y las previsiones incluyen el enfriamiento del producto a temperaturas menores a los 160º centígrados con lo que se licuará y se podrá transportar en tanques hasta Rotterdam. Con este proyecto, Holanda, se convertirá en el principal distribuidor de gas de Europa.
3) Emisiones de CO2. Decía el holandés Vincent Van Gogh, ¿Qué sería de la vida, si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo? Para mitigar los estragos del cambio climático, Holanda presenta innovación en proyectos para reducir la contaminación por petróleo, gas y carbón a través del almacenamiento de emisiones de CO2 y es que los expertos afirman que sólo podrá alcanzarse el objetivo propuesto para reducir las emisiones globales a la mitad de las que persistieron en 1990 para el 2050, si el mundo empieza a almacenar bajo tierra parte del bióxido de carbono. Con este proyecto los holandeses se posicionan como líderes en el tema junto con Reino Unido y Noruega.
4) Biogás. Henry Ford decía que “…la mayoría de las personas gastan más tiempo y energías en hablar de los problemas que en afrontarlos.” Con hechos fehacientes, Holanda apuesta su futuro a la energía verde, así proyectan que para el 2010 circulen vehículos ecológicos que consuman este combustible que se produce por la descomposición de materia orgánica en ausencia de oxígeno. La Asociación de Provincias Holandesas ha acordado establecer más de 120 estaciones de servicio que surtan biogás, gas e hidrógeno. Con esta política Holanda se coloca como precursor y defensor de esta energía.
Si bien, los esfuerzos de Holanda serán ponderados por generaciones futuras, también hay que decir, que un grupo de países han comenzado a seguir los pasos de Holanda en lo que respecta a las energías renovables, entre ellos México.
En estos días de invierno, el sector energético celebra con cierto triunfalismo la entrada en vigor de dos leyes en la materia: 1) la Ley para el Aprovechamiento Sustentable de la Energía, que tiene por objeto promover eficiencia energética a largo plazo, el cuidado del medio ambiente y la sustentabilidad energética y; 2) la Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables y el Financiamiento de la Transición Energética, que tiene como finalidad, mejorar el aprovechamiento de los combustibles fósiles combinando el impulso a energías renovables. Estos ordenamientos representan un paso gigante, que hay que aplaudir.
Para todos con afecto, un deseo de prosperidad y salud para el año 2009 y feliz navidad.

*El autor es aspirante a doctorado en Derecho
por la Universidad Anahuac México Sur
y especialista en derecho energético. sabarragan@hotmail.com